

Las nuevas tecnologías y la capacidad de conectarse rápidamente en la red, mientras que por un lado han facilitado la posibilidad de comunicarse, por otro lado, han facilitado a los usuarios el acceso fácil a ideas que pueden propagarse rápidamente en las plataformas públicas.
Los secretos comerciales son informaciones confidenciales diseñados para permanecer en secreto y protegidos por los derechos de propiedad intelectual que aumentan considerablemente el valor comercial de una empresa. De hecho, en los nuestros años complejos y competitivos es importante que una empresa proteja secretamente sus activos. Cualquier información valiosa y delicada desde el punto de vista comercial puede calificarse de secreto comercial.
Algunos de los secretos comerciales más famosos del mundo son, por ejemplo, la receta de Coca Cola o el algoritmo de Google, que tienen un valor inmenso. Estas impresas pronto han sabido reconocer que el valor de setos activos particulares de propriedad intelectual reside en el hecho de que sean secretos, y que protegerlos como secretos comerciales les permite mantener su ventaja competitiva.
A diferencia de los derechos de propiedad intelectual (PI) tradicionales, como patentes, marcas y diseños industriales, los secretos comerciales no son derechos exclusivos y se limitan a un asunto específico, pero se puede iniciar una acción por cualquier adquisición ilegal de cualquier secreto y uso indebido contra tercero, si han sido obtenido a través la confianza o el robo.Además, el titular puede solicitar una indemnización o requerir la cesación de las acciones ilícitas de la parte.
Al igual que con otros derechos de propiedad intelectual, los secretos comerciales se rigen por las leyes nacionales de cada país donde están protegidos, pero a diferencia de las patentes y marcas comerciales, si se desea registrar un secreto comercial, no tiene que cumplir con requisitos formales, aunque cada país cuenta de leyes que regulan la malversación o adquisición no autorizada de secretos comerciales.
En Europa la Directiva de la UE de 2016 n. 943 trata regula la protección de los conocimientos técnicos confidenciales y la información comercial, el uso, la adquisición y la divulgación ilícita de secretos comerciales. También en Italia con el Decreto Legislativo n. 63 de 11 de mayo de 2018, la Ley interna se ha adaptado a la nueva legislación europea incorporando todas las definiciones sobre el tema, como la definición de secreto comercial, la consideración de conducta ilícita incluso por negligencia, la limitación de cinco años, la confidencialidad de los secretos comerciales durante el proceso y la introducción de medidas correctivas y sanciones.
Cuando se trata de proteger los activos de una propiedad intelectual, una decisión difícil de tomar es elegir si registrar una patente, por ejemplo, o protegerla como un secreto comercial. Por esta razón, la respuesta no es obvia, es necesario ponerse en contacto con un abogado especializado que pueda ayudar a la empresa a tomar la mejor decisión. Obviamente, en la evaluación es necesario tener en cuenta muchos factores, como los costos de protección y los intereses de los inversores.
A menudo, recurrir al registro de una patente puede ser un proceso largo y costoso, por lo que las pequeñas y medianas empresas utilizan el proceso de protección de secretos comerciales con mayor frecuencia, un procedimiento más simple y con menores costos, pero que pueden dar a la empresa grandes y productivas ventajas económicas.